Cómo sobrevivir al frío en la Costa Azul
Con la llegada de noviembre, el frío se ha instalado en la región…
Y aunque la Costa Azul está considerada como la zona más templada y soleada de la Francia metropolitana, ya percibimos las primeras evidencias – las primeras nieves en el interior, lloviznas constantes… – que nos invitan a sacar los gorritos y las bufandas del armario.
Que estés de visita o que te hayas instalado en la Costa Azul recientemente, estos consejos te servirán para sobrevivir a esta temporada:
1. Mentalizarse del cambio
La calefacción y las mantas se vuelven indispensables dentro de las casas pero, antes de salir a la calle, es conveniente prever todo el vestuario de invierno necesario para evitar que los cambios de temperaturas, que pueden situarse bajo los cero grados centígrados, hagan estragos. No olvides los gorritos, bufandas, guantes, abrigos térmicos y paraguas, en caso de lluvia.
2. Preparar el cuerpo
Consumir alimentos ricos en vitaminas, como los cítricos, las verduras y los lácteos, ayudará al cuerpo a mantener alejados los resfriados. La hidratación frecuente de la piel se hace ahora más importante, sobre todo, en las manos y la cara. Tener una barra de protector labial a mano puede resultar muy útil, ante la sequedad de los labios expuestos al aire frío.
3. Ocuparse del vehículo
Revisar los neumáticos, ajustar su presión o cambiarlos, en caso necesario, es fundamental para evitar sustos en las carreteras. Las cadenas para la nieve hay que tenerlas preparadas, no sólo para partir a la montaña, sino también para las carreteras de toda la región. Un consejo muy práctico, sobre todo, para las mañanas: llevar siempre una rasqueta y líquido anticongelante, para quitar el hielo del limpiaparabrisas.
4. Ser flexible los días de nieve
Al no ser tan usual como en otras regiones de Francia, la llegada de la nieve en nuestras ciudades y pueblos –dos o tres veces cada invierno- provoca un caos en las carreteras. Muchas quedan cortadas al paso, en horas punta, se puede llegar a pasar en retención más de cinco horas, en especial en los accesos a Sophia-Antipolis; la autopista se colapsa, el servicio de autobús y ferroviario no funciona o lo hace con grandes alteraciones; la actividad escolar se suspende el mismo día… En definitiva, ese día, no dudes en llamar al jefe para prevenir del retraso o para preguntar si puedes trabajar desde casa. ¡Paciencia!
5. Modificar las actividades
El baño en el mar, en esta época, es una aventura resevada a los más temerarios. Para los demás, siempre quedan las piscinas cubiertas, una forma de seguir practicando la natación, pero en agua templada, y sin riesgo de coger una pulmonía. Las caminatas exigen ahora una indumentaria adecuada y, en numerosas ocasiones, de raquetas. Una de las grandes ventajas de la Costa Azul se encuentra en que, de la playa, pasamos a la montaña, sin necesidad de salir de la región. La práctica del esquí y del snowboard se puede hacer a tan sólo una hora de Niza, en estaciones como Isola 2000, Auron o, más cerca de Grasse, en la de Greolières. El ocio de exterior, del que tanto nos gusta disfrutar en verano, hay que sustituirlo ahora por teatros, cines, exposiciones o conciertos en salas cerradas.
Consulta la Agenda de Costa Azul Digital: ¡hay muchas cosas por hacer esta temporada!