Fallece Secundo Alegre, el sacerdote español de Grasse

La Parroquia de Grasse ha comunicado el fallecimiento del sacerdote Secundo Alegre

El sacerdote falleció en España, el pasado sábado 25 de noviembre, rodeado de su familia. Desde el pasado verano, había sido operado y había guardado reposo, pero su enfermedad se encontraba ya bastante avanzada. En septiembre, Alegre regresó a su tierra, Zaragoza, para descansar acompañado de sus seres queridos.

Una misa en su memoria será celebrada el próximo sábado 9 de dicembre a las 11h en la Catedral de Grasse. La ceremonia estará presidida por Jean-Louis Gazzaniga, vicario general y antiguo cura de la Parroquia de Saint-Honorat.

El Padre Alegre, como lo conocía la comunidad española, vino a la capital del perfume en los años sesenta como capellán para acompañar espiritualmente a la importante comunidad de inmigrantes españoles, venidos sobre todo de Lorca y la región de Murcia, que se instaló en el casco de la ciudad. Después de una ausencia en España, desde mediados de los años 70 hasta finales de los ochenta, Alegre regresaría para instalarse definitivamente en Grasse. Desde entonces, ha acompañado en su ejercicio sacerdotal, no solo a las familias españolas, sino al conjunto de los grassois.

Desde hace casi 50 años, Secundo Alegre era una figura esencial de la vida parroquial y de Grasse

«Era una persona muy metódica, muy rutinaria y con un alto sentido de la responsabilidad. Si se comprometía a algo, lo hacía», nos cuenta Alicia, amiga del sacerdote desde los años 2000: «Por esa época, vi en un cartel que había una misa en español cada mes en Grasse y empecé a venir. Ahí conocí al Padre Alegre. Poco después nos hizo la preparación para el bautismo de mi hija».

Alegre cumplía sin falta sus compromisos dentro de la Iglesia y, también, fuera de ella con los expatriados españoles: «Para él era muy importante el contacto personal con los españoles fuera de la misa. Venía a comer a casa y, cuando mis padres venían, también lo invitábamos, se apreciaban mucho.» Veía a otros muchos españoles y disfrutaba de la rutina de ir a comer todos los sábados con una familia o a tomar el café todos los lunes con otra. En lo personal, el Padre Alegre era un aficionado al tenis «le gustaba mucho ver los partidos y animar a Nadal. Él siempre se sintió muy español y era patriótico«.

La ciudad que él conoció cuando llegó ya no es la misma. Antes, el casco antiguo estaba habitado casi exclusivamente por españoles. Españoles que construyeron y contribuyeron al desarrollo de Grasse. A principios de este año, de las 400 familias que llenaban la Misa española en la Catedral, solo quedaban una quincena. Algunos españoles de aquella época han fallecido, otros muchos, y sus hijos, han vuelto a su tierra. Pero todos, los que se fueron y los que ahora nos hemos quedado, un poco más huérfanos, le recordaremos con mucho cariño y le agradeceremos siempre todo lo que hizo por nosotros.

(Imagen: a la derecha, el Padre Alegre con parte del equipo sacerdotal de Grasse)

El padre Alegre al final de la misa española. Fotos cedidas por Alicia Valero
El Padre Alegre con familias españolas en Grasse. Fotos cedidas por Alicia V.
El Padre Alegre con familias españolas en Grasse. Fotos cedidas por Alicia V.

María Pérez

Editora de Costa Azul Digital. Periodista española, enamorada de la vida y amante de los viajes. Puedes encontrarme en Twitter y en Facebook.

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